De este modo, lastimosamente Mar del Plata sigue liderando la tasa de desocupación en Argentina, incluso por encima del Gran Buenos Aires (9,2 % de personas desocupadas), superando a Rawson y Trelew (8,9%), Salta (8,3) y Santa Rosa (7,8%).
En está contracara a las cual nos somete la falta de empleo, se constituye una variable de control social, sobre la cual se estima un precio de mercado, de cuanto el empleador debe pagar, poniendo un precio sobre la ausencia de trabajo y un estilo de competencia cruel, ante la falta de oportunidades laborales que nuevamente se consagran en nuestra ciudad.
Debemos trabajar fuerte desde las organizaciones para que imperiosamente el estado posibilite políticas económicas que favorezcan a todos los sectores de la sociedad. Donde el ojo también se posicione en la juventud, a la cual se le hace cuasi imposible contar con su primera experiencia de trabajo.
Mar del Plata debe recuperar esa identidad industrial, que sea el gran organizador de la vida social, una actividad que ponga nuevamente en funcionamiento la perspectiva que tenemos como sociedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario