1. Ganar no es siempre igual a jugar mejor. Aprende, disfruta cada partido, los entrenamientos, la combi, recorre la sensación de cómo la pasaste, no te quedes rumiando en cómo saliste.
2. Contagia a tus compañeros con los pases realizados, las paredes construidas, el caño que no salió, el mano a mano que tapaste, las pelotas recuperadas, la asistencia entre los centrales; el gol es consecuencia de todo esto.
3. Arriesga en los pases, equivócate, anímate a jugar, permítete equivocarte otra vez, ríete en la cancha y sé serio, cuando Talento más lo merezca.
4. Nunca olvides que la suerte no es tonta. Siempre juega para el que entrena más. Aprovecha ese entrenamiento para cuando llegue la hora de competir, de modo que a ti mismo, puedas demostrarte todo lo trabajado y ver cuánto aprendiste y qué hay por mejorar.
5. Aparece en las difíciles, cuando el Equipo te necesité. Ahí ofrécele a Talento lo mejor de vos, no te guardes nada.
6. Nunca olvides la enorme felicidad que nos da a los profes, él verte crecer contento, jugando y transpirando la camiseta junto a tus compañeros y amigos. Para nosotros sos intransferible, simplemente estamos con vos para acompañarte. Al fútbol hay que disfrutarlo y no sufrirlo, pensamos en vos como persona y no como crack.
7. Ya lo dijó él: es… “Hasta la victoria siempre”.
8. Ten respeto por el oponente, los árbitros y el público. Otra vez, no ganar a cualquier precio, la competencia es un medio, aceptar la derrota como parte del juego, y apoya al que no le toca ser titular.
9. Juga a la pelota.
10. Podrán quitarnos todo, menos la esperanza y la alegría.
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